. davidcampo .

domingo, 19 de octubre de 2008



Deformado interiormente,
Prototipo de una sucesión de igualdades
En la que monotonía toma el rol principal.
Nada innovador que deslumbre en mi interior,
Viviendo encerrados entre celdas de aburrimiento,
No hay suspiro que mantenga viva la esperanza,
Cruel frente de este mundo al que fielmente me expongo.


Cambio radical, algo que jamás logré alcanzar.
Repetitivo ese azar al que nunca decidí jugar,
Emulando cada instante presente por su anterior.
Algo tan vulnerable como la rutina
Presentada como un puzzle día tras día,
En el que si una pieza se extravía,
La cadena queda perdida, nada encaja en tu vida.


...


Tal vez el miedo que corroe
Mis dias y temores
Sea el culpable de estas escuetas oraciones.






david campo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

la monotonía nos destroza...la rutina del día a día que tu nombras...si perdemos una pieza nuestros esquemas se van a pique...tan horrorosa como necesaria.

supongo que debemos tratar de encontrar un equilibrio..pues si nos tiene que comer la monotonía...¿para que vivir...algo que sabemos como va a seguir?


un abrazo david

Anónimo dijo...

muy de acuerdo con tu replica, una vez escribí una frase que decía: "Quiero entrar de nuevo en la rutina solo para tener algo con que romperla."

buenas noches david!